En muchos vehículos los taqués son hidráulicos. El taqué es la pieza que se interpone entre la leva y la cola de la válvula (bien sea de admisión o escape), en la mayoria de motores son de acero, tienen la forma de un vaso.
Con los taqués hidráulicos se consigue eliminar el juego entre la leva y la válvula, se consigue mejor contacto entre leva y cola de válvula y un mayor
Existen varias disposiciones de los taqués dependiendo del fabricante, pero la mayoria están formados por el taqué que incorpora un émbolo interior con una válvula de retención y un muelle, llevan una canalización por donde el aceite entra al taqué. El aceite por la incompresibilidad que presentan los líquidos, solidariza al taqué con el émbolo de la siguiente manera. Cuando la parte saliente de la leva comienza a empujar al taqué, este presiona sobre la válvula, se desplaza y cierra el paso de aceite ya que la válvula de retención es empujada por el taqué. El aceite al ser incompresible solidariza el movimiento entre taqué y émbolo interior, empujando a la válvula correspondiente de la distribución. Cuando la leva deja de empujar al taqué, el muelle empuja al taqué, la válvula de retención se abre y el aceite vuelve a entrar al émbolo empujando al taqué contra la leva y al émbolo contra la cola de la válvula, con lo que se elimina la holgura. Así se compensa el juego por dilatación o contracción de la válvula y el desgaste de los elementos.
Con los taqués hidráulicos se consigue eliminar el juego entre la leva y la válvula, se consigue mejor contacto entre leva y cola de válvula y un mayor
Existen varias disposiciones de los taqués dependiendo del fabricante, pero la mayoria están formados por el taqué que incorpora un émbolo interior con una válvula de retención y un muelle, llevan una canalización por donde el aceite entra al taqué. El aceite por la incompresibilidad que presentan los líquidos, solidariza al taqué con el émbolo de la siguiente manera. Cuando la parte saliente de la leva comienza a empujar al taqué, este presiona sobre la válvula, se desplaza y cierra el paso de aceite ya que la válvula de retención es empujada por el taqué. El aceite al ser incompresible solidariza el movimiento entre taqué y émbolo interior, empujando a la válvula correspondiente de la distribución. Cuando la leva deja de empujar al taqué, el muelle empuja al taqué, la válvula de retención se abre y el aceite vuelve a entrar al émbolo empujando al taqué contra la leva y al émbolo contra la cola de la válvula, con lo que se elimina la holgura. Así se compensa el juego por dilatación o contracción de la válvula y el desgaste de los elementos.
